Concejales del Frente Creer Entre Ríos de Paraná presentaron este martes un proyecto para el reconocimiento y la declaración de utilidad pública y sujeto a expropiación de los terrenos lindantes al Patito Sirirí. La iniciativa se sostiene en “la defensa del espacio público y el derecho de los vecinos de Paraná, que durante décadas se han apropiado de este espacio para su recreación y esparcimiento, y que por estos días ven con preocupación cualquier intento de restringir ese espacio“, indicaron desde el oficialismo de la capital a través de un comunicado.
Los ediles explicaron que el destino que se pretende darle mediante su declaración de utilidad pública y consiguiente expropiación es la “conservación del espacio natural, el paisaje, su vista panorámica única y esa particular fisionomía, la cual es tan importante en sus beneficios para la ciudadanía como puede ser la ejecución de una obra pública como una calle o la construcción de un puente”.
El proyecto será analizado por las comisiones de Legislación General y de Desarrollo Territorial, Obras y Servicio Públicos del Concejo Deliberante y luego enviado a la Legislatura provincial, para que concrete la declaración de utilidad pública y sujeto a expropiación de los terrenos en cuestión. Surge, especialmente, a raíz de las posibles inversiones inmobiliarias que se harían en la zona, por parte de corredores que aseguran que los terrenos no son públicos.
La iniciativa surge luego de “recoger las inquietudes de vecinos cada vez que se pretendió avanzar sobre los espacios verdes de la ciudad, con diferentes manifestaciones por la defensa y protección de los espacios verdes y del libre acceso, con una alta valoración de la protección del ambiente y la naturaleza”, explicaron desde el Frente Creer.
“En el imaginario colectivo no hay límite alguno entre una porción y otra del terreno. Los vecinos se han apropiado históricamente de la zona, dándole la continuidad al Parque Urquiza y utilizándolo indistintamente para la recreación, el esparcimiento y la actividad física. El mirador que constituye esa parte de la barranca en todo su recorrido superior es considerado paisaje protegido, por su vista privilegiada sobre el río, una condición que no se da de manera continua y estable en todo el recorrido del río por nuestra ciudad. Estos sectores son únicos, cada uno con su particularidad, y deben ser protegidos y preservados por esas características, que además los convierten en un atractivo turístico de relevancia”, se argumentó en los fundamentos de la norma.