El Gobierno trabaja para enviar este viernes el acuerdo con el FMI a Diputados

La intención del Poder Ejecutivo es que el proyecto se apruebe en la Cámara de Diputados entre el 10 y 15 de marzo por lo que trabaja para enviarlo este viernes 25 de febrero. Será el principal tema del discurso que pronuncie en el Congreso el presidente Alberto Fernández el próximo martes.

Tanto Massa como el jefe del Frente de Todos, Germán Martínez, quienes durante febrero salieron a contener a la tropa tras el portazo de Máximo Kirchner, encabezarán las conversaciones con los jefes de los distintos bloques de manera de proyectar cómo será la eventual sesión.

La mayoría de los legisladores de Juntos por el Cambio -el principal interbloque opositor- se mostraron dispuestos a acompañar el acuerdo, pero todos aguardan por la famosa “letra chica”, que de esta manera se conocerá antes de que Fernández deje inaugurado el período ordinario de sesiones.

También esperan conocer “los detalles” -que el ministro Martín Guzmán prometió aportar en los anexos y venir a explicar- algunos oficialistas. Y reina por ahora, por supuesto, la incógnita sobre la postura que adoptarán los legisladores de La Cámpora.

Además, sigue sin pronunciarse la vicepresidenta Cristina Kirchner, quien mantiene un silencio tan absoluto que en sus redes ni agradeció por los saludos de su cumpleaños, el pasado 19 de febrero, gesto que suele tener.

La vice comanda el Senado, que en este caso será la cámara donde la ley quede definitivamente aprobada o no, y eso debe ocurrir antes del 22 de marzo, día que está previsto un vencimiento de pago al FMI por 3.200 millones de dólares. 

Según se anunció a fines de enero, la letra preliminar del acuerdo prevé una reducción del déficit fiscal primario que arrancará con un 2,5% este año, bajará al 1,9% en el 2023 y llegará al 0,9% en el 2024.

Se acordó, además, que el financiamiento monetario sea del 1% del PBI este año, para luego bajar al 0,6% en el 2023 y se reduzca a cero en el 2024, con el objetivo de converger en una situación en la cual no haya más financiamiento sistemático del Banco Central al Tesoro.

El financiamiento será de US$44.500 y se irá desembolsando una vez aprobadas las revisiones de las cuentas públicas que hará el FMI en forma trimestral.

Recientemente el propio presidente y el ministro Guzmán tuvieron que salir a aclarar que el acuerdo no prevé una reforma previsional, pero sí admitieron que se podría avanzar en modificaciones a regímenes jubilatorios especiales, como en los que se acogen jueces y diplomáticos.