El “transparentómetro” de Frigerio

Por Marisa Follonier (*)
Publicado en La Ciudad Revista

Días pasados, el Frente Más para Entre Ríos se ausentó del recinto de la Cámara de Diputados de la provincia, luego de que ocurriera un episodio de violencia política, donde Gustavo Hein, el presidente de la Cámara, agredió verbalmente a la Presidenta de ese bloque.

El clima en ambos parlamentos venía tensándose. En la Cámara de Senadores, donde Frigerio no tiene mayoría, el bloque opositor había introducido reformas al pedido de emergencia pública del gobernador. Martin Oliva, Senador por el Departamento Uruguay, y presidente de ese bloque, había argumentado con claridad la postura, explicando que darían las herramientas que requería el Ejecutivo pero cuidando expresamente a los municipios y el patrimonio provincial.

El episodio violento en Diputados, se dio en el medio de las presiones del Gobernador para obtener esta herramienta: “emergencia pública económica y financiera en materia de obras públicas, como así también, del estado de conservación de la infraestructura vial”. Todo estaba alineado para que aprobara una Cámara y siguiera a la otra. Pero en el medio, la Diputada Stratta cuestionó procedimientos parlamentarios y Hein no pudo controlar sus expresiones y recayó en violencia.

Esta declaración de emergencia, se sumaría a la de “educación” que, basada en la presunta necesidad de acelerar un plan de alfabetización, ya le dio a Frigerio vía libre para contratar de manera directa obra pública educativa y otros elementos, sin pasar por ninguno de los procedimientos de transparencia, concurso ni licitación pública que son habituales en el estado.

A diferencia de la primera “emergencia”, esta segunda abre el abanico completamente y le permitiría contratar “a dedo” las obras públicas, provisión de bienes, insumos, repuestos y suministros necesarias para llevar adelante “la recuperación de la infraestructura vial de la Provincia” ¿Ya tendrá una empresa o proveedor favorito? Porque en ese tipo de rubro, las sumas son sustanciosas y el control de la ejecución, más aún, dada la enorme extensión de caminos de Entre Ríos.

Esta emergencia tan ansiada por Frigerio, también le dará la plena potestad de re-determinar contratos de obra pública vigente, re-negociar pagos, poder parar obras o pagarlas con fondos de otras cuentas provinciales ¿Qué criterios usará para parar algunas obras, pagar a algunas empresas y a otras no?

La enorme cantidad de potestades que busca el Gobernador con esta declaración de emergencia, distan mucho de la transparencia batida en parche durante la campaña y a la que alude en cada entrevista. La transparencia parece estar también en emergencia y quedará suspendida al menos por un año, y si fuera por el máximo mandatario, aún más.

Frente a Daniel Enz, en el programa “Cuestión de Fondo”, Frigerio no ocultó su deseo y dijo que en el Senado, la declaración de emergencia “debería tratarse con la velocidad que nosotros la pedimos, porque lo que estamos haciendo es tratando de cuidar el erario público”. En ese momento, el periodista le señaló que este tipo de herramientas la habían pedido antes “Sergio Alberto Montiel, Mario Moine, Jorge Pedro Busti, Sergio Urribarri y Gustavo Bordet”, pero el actual Gobernador no ha querido medirse en ese saco y evadió el tema, refiriéndose al Certificado de Obra Pública.

Enz pudo realizar una pregunta crucial, y la hizo: “Si todo sale como está previsto en la Legislatura, usted va a gobernar con emergencia educativa, alimentaria, vial, en obra pública, en el patrimonio cultural, es decir, que significa contratar en forma directa, sin licitación y por vía de excepción en casi todo, desde alimentos hasta una obra ¿Cuál va a ser la contrapartida para controlar estas medidas de cierta discrecionalidad? ¿Va a haber algún cambio normativo?”

Frigerio, que parece dueño del “transparentómetro” aseguró que en su gobierno, a diferencia de cualquier otro, “no hay ninguna discrecionalidad” y, la pateó para atrás, diciendo que lamentablemente antes “se ha trabajado muy poco en la agilización de los trámites”. A Frigerio todo le parece lento, todos los mecanismos de licitación y concurso que le dan transparencia a los procesos, se le hacen eternos; y como ahora es él quien está al frente del Ejecutivo, cree firmemente que todos podemos confiar. Seguramente, esto esté relacionado a su magnánima condición de “argentino de bien”, a la que alude permanentemente, como otros dirigentes del PRO y La Libertad Avanza: “nosotros los argentinos de bien”.

(*) Periodista y ex viceintendenta de San José