Con el apoyo de algunos diputados radicales que responden a sus gobernadores, el oficialismo logró este jueves en la Cámara de Diputados la sanción del Consenso Fiscal 2021, que fue firmado en diciembre del año pasado por el Gobierno nacional y 21 provincias.
La votación resultó con 136 votos a favor, 108 en contra y 4 abstenciones, con el rechazo mayoritario de Juntos por el Cambio. Los entrerrianos del interbloque opositor rechazaron la norma con media sanción.
El diputado nacional entrerriano Marcelo Casaretto (Frente de Todos) defendió el Consenso Fiscal firmado en 2021 por 21 gobernadores con el Poder Ejecutivo.
“Nosotros como diputados representamos al pueblo de la Nación Argentina, especialmente a nuestras provincias. Esto tiene su origen en el Consenso Fiscal de 2017, firmado por el entonces presidente Mauricio Macri con los gobernadores de ese momento, muchos de los cuales siguen siendo los mismos. Más allá de lo que han dicho los que fundamentan el dictamen de la minoría, desde la oposición, en aquel momento se planteaba una baja gradual de impuestos en jurisdicciones provinciales. Esto claramente significaba un desfinanciamiento para arcas de las provincias, en un contexto donde el presidente usaba la herramienta del endeudamiento interno y externo”, señaló Casaretto.
Y agregó: “Esto fue inconveniente para el conjunto de los argentinos. Por eso, en 2018, se intensificó el endeudamiento nacional y a mediados de año se firmó el acuerdo con el FMI, con lo cual se solicitaron 45 mil millones de dólares. Ante la falta de recursos, las provincias fueron inducidas a tomar las herramientas de endeudamiento externo en moneda extranjera y el propio gobierno firmó la suspensión de las cláusulas del acuerdo de 2017”.
El diputado entrerriano cargó contra la oposición: “Es muy simpático decir ‘que se bajen los impuestos’. Este acuerdo no dispone ningún tipo de aumento para nadie. Cada provincia decidirá si bajan o no. Pero ya que están, avísenle a Larreta que derogue el Impuesto a los Ingresos Brutos y el Impuesto al Cheque. Pero que lo haga hoy”. “Cuando gobiernan tienen una actitud y cuando se sientan en la banca tienen una actitud populista de decir ‘nosotros queremos bajar los impuestos y los peronistas se los quieren aumentar”, finalizó.
El diputado nacional Rogelio Frigerio (Juntos por el Cambio), por su parte, argumentó su no acompañamiento al Consenso Fiscal. “El consenso fiscal de 2017 fue el último gran acuerdo político de Argentina, con más del 90% de las provincias, el 60% de la Cámara de Diputados y el 75% del Senado. Partía de un diagnóstico común, que era que el nivel de gasto era muy alto y muchas veces se vinculaba a privilegios de la política”, resaltó Frigerio.
Y agregó: “El otro consenso era que teníamos una presión impositiva que asfixiaba a los que producen, a los que generan empleo y a la sociedad toda. Nos decidimos, en consecuencia, a darle alivio fiscal. Y pusimos una regla en el gasto público, que no podía subir más que el Índice de Precios al Consumidor. Para algunos no fue suficiente, pero más allá de las divergencias, nos pusimos de acuerdo en un camino. Hoy, ese diagnóstico, ha empeorado significativamente. Hay más déficit y más presión. Pero en vez de dar señales en el sentido correcto, discutimos un proyecto que da marcha atrás”.
“Nosotros estamos dando señales de qué es lo que consideramos correcto, de cuál es el norte que precisa Argentina. Reducir el gasto público, especialmente de los privilegios y bajar los impuestos, sí es el camino“, acotó luego el legislador. Y finalizó: “Lo que se está por votar no es una buena noticia para que los producen, para los que invierten y buscan empleo”.