Ganancias obtuvo dictamen exprés y podría aprobarse la semana próxima

La Comisión de Presupuesto y Hacienda del Senado, presidida por el riojano Ricardo Guerra (FNyP), se reunió este jueves para avanzar con el proyecto del ministro de Economía y candidato a presidente de Unión por la Patria, Sergio Massa, para modificar la ley de Impuesto a las Ganancias que obtuvo la media sanción este martes en Diputados.

Desde el oficialismo apuraron el dictamen y buscarán que la semana próxima pueda llevarse una sesión en la Cámara alta para conformar la ley. Juntos por el Cambio anunció que votará en contra del proyecto.

Una vez comenzado el tratamiento de la modificación del Impuesto a las Ganancias, el titular de la comisión Guerra resumió los puntos principales del proyecto en revisión: “Corrige un desvío que tenía la ley en la cuarta categoría y establece la fijación de un mínimo no imponible valuado en términos del Salario Mínimo, Vital y Móvil y lo fija en un valor de 1.770.000 pesos”.

En tal sentido, afirmó que “el salario no es ganancia, es una remuneración al trabajo”, y agregó: “Los salarios brutos que se encuentren en 15 mensuales o 180 anuales, hacia abajo dejarán de tributar y quienes perciban un salario por encima de los 1.770.000 pesos abonarán una alícuota entre el 27 y el 35 por ciento”.

La iniciativa fue aprobada el último martes en Diputados con 135 votos a favor, del oficialismo, los libertarios, la izquierda y bloques federales; y 103 en contra, de Juntos por el Cambio y los legisladores del interbloque Federal que responden a Juan Schiaretti.

Ganancias: qué propone el proyecto

La propuesta busca que se elimine la cuarta categoría de Ganancias y sólo pagarán el impuesto los mayores ingresos, cuyo valor esté por encima de 15 salarios mínimos, vitales y móviles, actualmente equivalente a $1.770.000 -nuevo mínimo imponible-, que se irá actualizando.

De este modo, se prevé que el tributo alcanzará a 90 mil contribuyentes (actualmente lo pagan 700 mil), que representan un 0,88% de los trabajadores registrados en Argentina. Entre quienes seguirán pagando se encuentran CEO’s, puestos calificados, cargos políticos y jubilaciones de privilegio.

Además de mantener el beneficio de deducción del 22% para zona desfavorable, la iniciativa crea el denominado “impuesto cedular” para los mayores ingresos, que va a entrar en vigencia a partir de enero de 2024, y tendrá una escala progresiva con alícuotas que oscilan entre el 27% y 35%.